
Hoy 31 de octubre de 2008, la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la UNLP se hace presente en este acto, para homenajear a nuestro compañero Daniel Elías, en la lucha por la búsqueda de la verdad y en defensa de los derechos humanos.
En una sociedad que tiene 30.000 desaparecidos, y que se encuentra en constante lucha por la búsqueda de justicia, es imprescindible pensar a la Memoria como una fuerza de transformación para las sociedades, generadora de cambios, memoria entendida como recurso político, imperativo ético y necesidad histórica. El compromiso como motor de la recuperación de la memoria es necesario para toda la comunidad.
Al hablar de memoria nos estamos refiriendo a lo comunicativo, lo dramático, lo sociológico, lo colectivo, lo histórico y lo práctico como diferentes dimensiones sobre las que reflexionar. Rodolfo Walsh decía que un pueblo que no tiene memoria es un pueblo condenado a repetir su historia.
La Universidad Pública desempeña un rol fundamental en la lucha y el respeto por el cumplimiento de los Derechos Humanos de las personas. Prueba de esto, es el papel que ha desarrollado en la historia política y social de nuestro país. Por eso, la universidad, como agente motor de cambio básico de nuestra sociedad, debe trabajar en aspectos esenciales como la recuperación de los relatos memoriales de nuestras víctimas como forma de reivindicar luchas pasadas, para que exista justicia, pero también en función de futuro, para que no vuelva a suceder otro genocidio.
A pesar de algunas apuestas al olvido, no puede afirmarse que este sea un país sin memoria, porque ocurre que las víctimas directas e indirectas nunca renuncian a sus exigencias de verdad y justicia, ni los pueblos que han vivido épocas de horror y desesperanza deponen su derecho a saber, de pelear por convicciones justas y verdaderas, como hoy lo estamos defendiendo, porque ninguna sociedad podrá sobrevivir si no se les da identidad a sus muertos, si no es capaz de resucitar la memoria de los que no están.
La identificación del cuerpo de nuestro compañero es un gran paso en ese sentido, pero sabemos que en la búsqueda de justicia faltan dar muchos pasos más, recuperar más de 400 niños expropiados, encontrar a todos nuestros desaparecidos, juzgar a todos los genocidas y también construir un país con verdadera y profunda justicia social, ésta fue la causa por la que Daniel Elías luchó y el motivo por el cual le arrancaron la vida, pero no pudieron arrancarle ni su historia, ni sus ideales, este es el orgullo que sentimos por él y el ejemplo que todos y todas debemos seguir.
Por eso elegimos esta frase para llevarlo en nuestra memoria: "El pueblo aprendió que estaba sólo y que debía pelear por sí mismo y que de su propia entraña sacaría los medios, el silencio, la astucia y la fuerza" Rodolfo Walsh.
Gracias Daniel por todo lo que nos enseñaste.
Leandro Mata
(Octubre 2008)
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